Un biofiltro es un humedal artificial de flujo subterráneo, sembrado con plantas de pantano en la superficie del lecho filtrante, por donde las aguas pluviales fluyen lentamente de forma horizontal. Durante el recorrido por el humedal, el agua recorre las zonas cercanas a las raíces de las plantas.
De esta manera es depurada de diversas maneras: por la acción de microorganismos que se adhieren a la superficie del lecho, por la metabolización de nutrientes de las plantas y por procesos físicos tales como la filtración y la sedimentación.
Así, los residuos que circulan por las calles y cunetas no terminan en la laguna.